Las empresas de reciente creación
y las personas que deciden emprender cada vez son más abundantes. Aquellas que consiguen hacer frente a todas las dificultades para ponerla en marcha y que sobreviven el crítico período inicial necesitarán la ayuda de incorporar a sus filas personas que colaboren aportando su conocimiento y experiencia. Cada vez más las personas en búsqueda de nuevas oportunidades laborales deben seguir de cerca las empresas que han nacido y que están haciendo cosas.
La pregunta que a muchos os puede surgir es qué tipo de perfiles buscan las empresas de reciente creación y con qué tipo de competencias. Estas preguntas, en mi opinión, tienen múltiples respuestas con un mismo enfoque. Estas empresas buscan perfiles muy especializados con capacidad de ser polivalente, abarcando diferentes tareas o funciones. Es decir, estas nuevas empresas no tienen esas estructuras mentales estáticas en el ámbito corporativo, donde cada departamento no se sale de sus tareas o rol marcado. Se busca personas con ganas de rotar, hacer cosas nuevas, proponer cambios, ver nuevas necesidades que se puedan convertir en vías de negocio futuro.
Las empresas de nueva creación son flexibles por naturaleza y convicción donde coexisten fácilmente personas con nula experiencia laboral pero muchas ganas de aprender y las personas con un amplio periplo profesional a sus espaldas. Por supuesto que surgen problemáticas y desavenencias que son salvables. Las carencias de unos las cubren los otros y viceversa. Cada perfil tiene cosas que aprender de los otros. Es decir las personas con amplia experiencia tienen mucho que aprender de las personas sin experiencia pero con amplia formación y visión global.
Por lo tanto, trabajar en estas nuevas empresas supone derribar nuestras fronteras invisibles de reticencia al cambio porque siempre hemos estado acostumbrados a que nos marquen qué hacer en las empresas en las que hemos trabajado. Cada vez más, aunque aun no sea la mayoritario, las empresas quieren personas que aporten cosas, que busquen soluciones, que sean especialistas en su área y que no estén a la espera de que les diga su empresa o responsable qué hacer o cómo ejecutar su trabajo. Las nuevas empresas que están surgiendo quieren personas responsables, autónomas, con iniciativa, con capacidad autocrítica, con visión global, exigentes, flexibles y adaptables.
Estas empresas son a nivel jerárquico planas y muy horizontales donde no importa tanto el rol que tienes sino que cualquiera puede proponer, hacer y participar. Lo realmente importante es el equipo humano y el resultado final conseguido en el que todas las personas tienen su protagonismo. Estas nuevas empresas valoran a todas sus personas su esfuerzo, involucración, dedicación y flexibilidad.
Por lo tanto, las empresas que han surgido recientemente quieren personas con afán de superación, con ganas de seguir aprendiendo y formándose con los nuevos sistemas disponibles en la red, donde la auto formación es la mejor opción. Estas empresas les dan tiempo de su jornada para poder cubrir sus necesidades formativas de la forma que cada trabajador estime más adecuada a su forma de aprender. Está claro que estas empresas surgen con muchas carencias o retos en lo que a políticas corporativas se refiere pero lo suplen con flexibilidad y haciendo lo más protagonista posible a cada persona de su itinerario profesional en la organización.
Estas empresas seleccionan de una forma más flexible, donde lo importantes es que muestren las personas que se incorporan lo que saben hacer y no tanto lo que dicen que saben hacer. De la misma forma, están abiertas a propuestas de colaboración win-win donde las dos partes ganan. La interactuación es clave en estas nuevas empresas donde las personas dispuestas a llevar a cabo cosas tienen mucho que aportar y, si va bien, tienen todo a su favor para ser un referente profesional en esa empresa que acaba de comenzar a andar.
Creo que la búsqueda de talento está experimentando un giro de 180 grados y esta nueva perspectiva que parece extinguirse antes de haberse consolidado es el futuro necesario y lo que el mercado nos marca. Está claro que las empresas creadas, consolidadas y desarrolladas en las épocas tradicionalistas de los tiempos capitalistas se niegan a adaptarse y luchan con todas sus fuerzas por frenar ese nuevo ciclo evolutivo.
